El deporte previene muchas enfermedades, por lo que se debe realizar de manera informada, consciente y sin excesos. Las lesiones deportivas se definen como todo accidente o disfunción física acontecida durante la práctica deportiva o como consecuencia directa de ella. Las lesiones más comunes suceden en extremidad inferior en la articulación de la rodilla donde ocurren lesiones ligamentosas, musculares, óseas y tendinosas.

Para prevenir las lesiones en el deporte, se debe valorar inicialmente la postura y determinar desequilibrios artro-musculares previos del paciente, realizar calentamiento previo para pasar de un estado de reposo a uno de actividad controlada, trabajar en flexibilidad para fijar articulaciones, realizar trabajo de fuerza como factor protector, trabajo excéntrico para integridad funcional de tendones y reforzamiento articular y trabajo propioceptivo para mayor control sobre las articulaciones.

La estimulación temprana tiene como objetivo desarrollar y potenciar, a través de juegos, ejercicios, técnicas, actividades, las funciones del cerebro. La estimulación temprana debe centrarse en el desarrollo de la motricidad gruesa como movimientos de extremidades y de motricidad fina como movimientos precisos con los dedos.

Algunos ejemplos son el control de la cabeza que estimularemos cuando el bebé se encuentre recostado ofreciéndole juguetes llamativos, estimular voltearse con ayuda de una manta para que el niño ruede hacia el otro lado, el desarrollo de movimientos finos de manos mediante la colocación de un dedo en la palma de su mano para que cierre la misma y ayudar a estimular los reflejos, desarrollar y estimular el equilibrio tomándolo por las axilas e inclinarlo hacia los lados, adelante, atrás y dejar que se enderece solo, otras formas de estimulación es el baile, mediante el empleo de canciones en los que la letra indique las acciones que realizará el paciente, todo esto se debe realizar de manera paciente y segura.

Según la OMS las caídas son la segunda causa de muerte por lesiones accidentales, pueden provocar hematomas o lesiones graves como luxaciones y fracturas. Algunas causas son los trastornos físicos, visuales y falta de equilibrio relacionado al envejecimiento. Las acciones más importantes para prevenir la caída de adultos mayores son: crear zonas seguras con mayor iluminación, adaptar baños y habitaciones, uso de calzado cómodo, mantener los utensilios ordenados, evitar todo tipo de obstáculos en el suelo, controlar medicamentos y el uso de aparatos ortopédicos. El papel de la rehabilitación en la prevención de caídas es la realización de ejercicios para mejorar la flexibilidad, movilidad articular y mejorar el equilibrio y coordinación.

Referencias

Ma José Calero; Guillermo López-Cala; Ana R. Ortega; Alfonso J. Cruz-Lendínez.. (2016). Prevención de caídas en el adulto mayor: revisión de nuevos conceptos basada en la evidencia.. European Journal of Investigation in Health, Volumen 6, págs 71-82. 19/03/2022, De Dialnet

Fajardo, E., Pazmiño, M. I. A., & Dávalos, Á. (2018). La estimulación temprana como factor fundamental en el desarrollo infantil. Espirales revista multidisciplinaria de investigación, 2(14), 25-36.

Moreno Pascual, C., Rodríguez Pérez, V., & Seco Calvo, J. (2008). Epidemiología de las lesiones deportivas. Fisioterapia, 30(1), 40–48. doi:10.1016/s0211-5638(08)72954-7